martes, 28 de junio de 2011

Midninght in Paris

Sólo puedo decir que vuelve Allen, me ha encantado, es mágica. Reconozco que me ha costado trabajo ir a verla, después de películas como Si la Cosa Funciona, Vicky Cristina Barcelona o Conocerás al hombre de tus sueños, que desde mi humilde opinión son bodrios, una se vuelve reticente al cine de Allen.  No estoy muy de acuerdo con lo de hacer una película al año.
En Midnigth in Paris, para los que conocen la filmografía del director, reconocerán fácilmente referencias a otras películas del autor, las imágenes iniciales en las calles de París recuerdan mucho a Manhattan o la inmersión a un mundo mágico de La rosa púrpura del Cairo.
Como en otras pelis del director, Owen Wilson, protagonista de la película, se convierte y de forma magistral en el álter ego de Allen, su compleja personalidad e incluso su forma de vestir.
Partiendo de la frase “cualquier tiempo pasado fue mejor”, Allen nos hace una retrospectiva al Paris de principios de S.XX, con personajes como Scott Fitzgerald, Salvador Dalí o Ernest Hemingway, de hecho, y es algo que me ha encantado, al ver la película tenía la sensación de estar leyendo un libro.
Una combinación perfecta de amor, música, arte y magia en las noches de la ciudad de la luz, creo que un sueño para cualquier espectador.
He leído en alguna crítica la dificultad que puede suponer para el espectador el reconocer a la gran cantidad de personajes que aparecen, es posible que si no conoces a la mayoría andes un poco perdido, pero bueno también sirve para aprender.
Merece la pena verla, todos hemos pensado en lo felices que seríamos si viviésemos en otra época o en otro lugar, quizás olvidamos que nuestra felicidad es el ahora. Pues con esto no dejad de ver la película y sobre todo como he dicho en más de uno de mis post no os olvidéis nunca de soñar.

El cartel es genial, la Noche Estrellada de Van Gogh, un día haré un post con los cuadros de mi hermana, mi padre y los míos cuando nos dio por pintar imitando a Van Gogh, tenemos la casa llena.

martes, 21 de junio de 2011

I love Kling

Hoy os hablo de Kling, desde que mi gran amiga Cati me descubrió la tienda en el Mercado de Fuencarral tengo que confesar que me he enamorado, podría asegurar que fue un flechazo y eso que yo no soy de creer mucho en el amor a primera vista. Últimamente mi criterio está basado en un "me gusta" o "no me gusta", sin matices, así me complico menos. Pues Kling "me gusta" y mucho. 
Por lo que he leído la firma empezó a venderse únicamente en el Mercado de Fuencarral pero en poco tiempo se ha convertido en un referente de moda alternativa en España. Ha abierto tiendas propias en Madrid, Granada, Asturias, Barcelona y está presente en numerosas tiendas multimarca.


Lo que más me gusta es la originalidad de los diseños, muy casual, juvenil y sobre todo con unos cortes muy favorecedores. Otra de las cosas que me gusta es el color y los estampados de la ropa, tan joviales y divertidos que me recuerdan a más de un vestido que llevaba yo por los 80'. Cuando entras a Kling cada prenda desprende optimismo, y que queréis que os diga, a mi esa sensación me encanta.
Entrar a una tienda en la que no sabes si estas en una discoteca de un polígono o te has teletransportado a otra época y estas de ruta del bakalao lo único que me produce es la misma sensación que cuando he montado en una noria, ganas de vomitar. Y si, soy muy radical con esto pero es insufrible. 
Volviendo a Kling, otra de las cosas que me gustan es que puedo permitirme comprar cualquiera de sus diseños, y una que no es una ahorradora y que su cuenta corriente siempre está en números rojos pues es un detalle importante. Lo peor no tener tienda Kling en Murcia, pero bueno todo se puede comprar on-line. 
Las fotitos que he puesto son mis últimas adquisiciones, espero que os guste tanto como a mí.